En estos momentos, entre otros trabajos, tenemos entre manos en el Astillero la renovación de la cubierta de teca de un Wauquiez Centurion 45.
El Armador de la embarcación, de nacionalidad Inglesa, nos contactó el verano pasado para que nos ocupásemos de diferentes trabajos sobre elementos que requerian atención en su embarcación.
Uno de ellos, el que más le preocupaba, era la cubierta, que además de estar vieja y tan desgastada que tenía los tornillos visibles en muchas zonas, la goma desprendida, y en muchos sitios había perdido espesor de teca hasta casi llegar al fondo de la ranura, hacia agua en algunas zonas.
Nuestra sugerencia inicial fue que la cambiase por una nueva, pero el Armador tenía la idea de aprovechar la madera de teca, y la poca vida que todavía latia sobre la cubierta.
Es cierto que la embarcación todavía tenía, salvo en zonas, un espesor suficiente de teca, y como pudimos comprobar posteriormente al sacar los herrajes de la cubierta, el barco tuvo en algún momento de su vida un generoso espesor de madera sobre su cubierta de más de 12 mm.
En las zonas en las que la madera se había desgastado más allá de su posible recuperación, tuvimos que arrancarla, y pegar nuevas tablillas de teca, incluyendo piezas enteras de teca de más de 6 metros en los laterales del techo de la cabina.
El paso inicial, tras comprobar la buena adherencia de la madera, fue sacar todos los tornillos, sellar los agujeros, y volver a taparlos con tapines de teca.
Y en estos momentos, estamos con el tedioso trabajo de volver a hacer las ranuras en todas las juntas, eliminando la goma vieja, y limpiandolas e imprimandolas a continuación para meter nuevo Sika de calafateado.